SIGHISOARA: UN PASEO POR LA CUNA DE VLAD EL EMPALADOR
Vamos a viajar a los bosques de Transilvania para encontrar una ciudad llena de historia, misticismo y leyenda. Hablamos de Sighisoara, la ciudad en la que nación Vlad Tepes, más conocido como ¡DRÁCULA!
Sighisoara es una ciudad medieval situada en el corazón de Rumania, a unos trescientos kilómetros de Bucarest; la capital del país, y a unos cien kilómetros de Brasov. A pesar de ser uno de los lugares más visitados y emblemáticos del país, ha conseguido mantener una atmósfera única. Os aseguro que, al pasear por sus estrechos callejones, uno puede pensar que ha llegado a un lugar que ha logrado detenerse en el tiempo.
Nosotros tuvimos la suerte de disfrutar de las dos versiones de esta ciudad; la de día y la de noche. De noche, la niebla cubre el centro y, al no haber una sola alma por las calles, no nos costó disfrutar de esta ciudad, en la que sobrevuela en todo momento la leyenda de Vlad Tepes, al que también conoceréis como el Conde Drácula. Por la mañana, la luz revela los vivos colores de sus edificios y sus jardines. Es en este momento en el que Sighisoara parece una ciudad totalmente diferente a la que recorrimos unas horas antes. Realmente es como si hubiéramos estado en dos ciudades diferentes.
SIGHISOARA, LA CIUDAD DE DRÁCULA
Sighisoara es conocida por su vecino más ilustre: Vlad el Empalador. Se cree que el famoso vampiro de la literatura y el cine nació en una casa en la parte superior de la ciudadela, que es el área fortificada de la ciudad. Hay un pequeño museo en su interior donde se puede aprender más sobre su historia y la leyenda que rodea a este personaje. Todo esto es mucho mejor que visitar el dichoso Castelul Bran… Además, si os encantan las películas de terror y os llama la atención el mundo del más allá, os recomiendo visitar el cementerio de la ciudad. Es uno de los lugares más curiosos que he visto. Eso sí, no me veo visitándolo de noche…
Otro de los puntos más importantes y que más recomiendo visitar de Sighisoara, es su famosa torre del reloj. Si conseguís subir los 175 escalones, podréis disfrutar de una espectacular vista de toda la ciudad y de los paisajes naturales que la rodean.
En resumen, Sighisoara es una ciudad fascinante que combina historia y leyenda. Eso sí, os recomiendo que, al igual que nosotros, recorráis sus calles de día, pero también una vez ha caído la noche.
Os dejo un artículo donde os cuento nuestra ruta de diez días por Rumanía.